Las ninfas, como ya mencionamos, son aves dóciles. Disfrutan la compañía de las personas que están en su entorno. Especialmente si han sido criadas en cautiverio. Les encanta que las acaricien y que les dediquen algún tiempo todos los días. A cambio nos regalan su afecto sus cantos y silbidos. Incluso pueden imitar muchos sonidos y aprender a decir algunas palabras. Especialmente los machos, que son los más parlanchines.
Las hembras tienen menor capacidad para vocalizar, pero con dedicación pueden llegar a hacerlo, no obstante son más cariñosas y les gusta mucho estar acompañadas. En general las ninfas son aves de gran inteligencia. Buen comportamiento que les agrada una vida familiar en la que puedan interactuar con quienes las cuidan. Con buen cuidado y mucho cariño pueden llegar a vivir hasta 20 años.
Para sus cuidadores la ninfa es un ave con la que pueden mantener una relación muy especial de afecto. Es muy cariñosa. Especialmente si se ha criado en casa desde que era un pichón. Ya que se acostumbra a las personas que viven en casa y nuestra su felicidad con cantos y silbidos. La compañía de las ninfas es terapéutica ya que son muy sociables y la interacción con ellas ofrece muchos beneficios a sus cuidadores. Entre ellos:
- Ayudan a elevar su afectividad y sociabilidad.
- Ayudan a minimizar niveles de ansiedad y estrés.
- Ayudan a regular el ritmo cardíaco.
- Ayudan a mejorar la motricidad.
- Ayudan a mejorar la autoestima
- Aumentan la independencia.
- Son coadyuvantes en el tratamiento de algunas enfermedades.